Las redes empresariales rara vez aparecen en las noticias a menos que la noticia sea mala, y un corte de red no planificado está entre las peores cosas que pueden ocurrir.
En 2017, un sutil error tecnológico de uno de los proveedores de servicios en la nube más grandes del mundo desconectó una gran cantidad de servidores durante cuatro agonizantes horas. Según una estimación, esto les costó 150 millones de dólares a las compañías S&P 500, mientras que las compañías de servicios financieros de EE. UU. perdieron 160 millones de dólares.
Por supuesto, el impacto financiero es solo un aspecto de un corte de red. El verdadero costo también incluye la pérdida de productividad y el daño a la reputación. A medida que nuestra dependencia de la infraestructura de TIC aumenta, el costo de un corte no planificado solo se incrementará.
Si bien los cortes de red no planificados son el aspecto más costoso y visible de la confiabilidad de la red, en realidad hay muchos otros. La comunicación inalámbrica dentro de los edificios, las conexiones estables y confiables con dispositivos de Internet de las cosas (IoT) y el soporte para la variedad de sistemas de gestión de edificios requieren una infraestructura de red confiable.
Una infraestructura de red robusta, redundante e inteligente puede contribuir en gran medida a minimizar las posibilidades de un corte de red no planificado y maximizar la productividad en toda la empresa. El enfoque debe extenderse más allá de los problemas de redundancia y de la administración de la infraestructura automatizada.
La correcta estrategia de conectividad puede ayudar en gran medida a maximizar la confiabilidad y disponibilidad de la red. El grado de éxito depende en gran medida del diseño, la composición y la administración de la red empresarial. A continuación, algunas áreas para examinar.
Inteligencia de la infraestructura
Los sistemas de administración de la infraestructura automatizada (AIM), como imVision® de CommScope, pueden ser una estrategia clave en el esfuerzo por maximizar la confiabilidad y la disponibilidad. Los sistemas AIM utilizan una plataforma inteligente para monitorear continuamente toda la conectividad de la red en la capa física. Además, pueden documentar automáticamente todos los cambios e incluso alertar al personal en caso de que se detecte una nueva conexión no programada u otra circunstancia potencialmente perturbadora.
Soporte de la infraestructura convergente
La convergencia es cada vez más importante en la red LAN empresarial. Bajo este nuevo paradigma, el cableado de cobre de Categoría 6A es el componente fundamental. Más allá de simplificar la red física, permite a sus administradores transportar fácilmente velocidades superiores y proveer mayor ancho de banda para las tecnologías emergentes. Usando la Categoría 6A como el medio preferido para la alimentación remota vía PoE, los administradores pueden fácilmente extender la red hasta el límite, usando por ejemplo PoE mejorado para integrar la conectividad IoT y los dispositivos que requieran mayor potencia. En palabras simples: una red empresarial convergente basada en Categoría 6A puede mejorar la confiabilidad de la red y la continuidad del negocio.
Cableado estructurado con componentes modulares
El crecimiento, la migración y la modificación de la red en los edificios comerciales son un hecho. Los operadores de red deben tener la capacidad de adaptarse fácilmente a estos cambios, y con un impacto mínimo en los usuarios. Esto requiere una topología de cableado estructurado bien planificada que sea capaz de ampliarse y extenderse a petición, utilizando componentes modulares que se puedan cambiar para permitir nuevas tecnologías y más altas velocidades. Mediante la integración de diversos conceptos, como una red de conectividad universal (UCG), los operadores también pueden proporcionar escalabilidad preparada para el futuro para sistemas de comunicación inalámbrica dentro de los edificios, como Era™ de CommScope.
A medida que la red empresarial se vuelve más conectada, proteger los datos confidenciales se vuelve una tarea compleja. Mantenerse un paso adelante de los riesgos potenciales es un trabajo de tiempo completo.
En 2017, un sutil error tecnológico de uno de los proveedores de servicios en la nube más grandes del mundo desconectó una gran cantidad de servidores durante cuatro agonizantes horas. Según una estimación, esto les costó 150 millones de dólares a las compañías S&P 500, mientras que las compañías de servicios financieros de EE. UU. perdieron 160 millones de dólares.
Por supuesto, el impacto financiero es solo un aspecto de un corte de red. El verdadero costo también incluye la pérdida de productividad y el daño a la reputación. A medida que nuestra dependencia de la infraestructura de TIC aumenta, el costo de un corte no planificado solo se incrementará.
Más allá del tiempo de inactividad
Si bien los cortes de red no planificados son el aspecto más costoso y visible de la confiabilidad de la red, en realidad hay muchos otros. La comunicación inalámbrica dentro de los edificios, las conexiones estables y confiables con dispositivos de Internet de las cosas (IoT) y el soporte para la variedad de sistemas de gestión de edificios requieren una infraestructura de red confiable.
Una infraestructura de red robusta, redundante e inteligente puede contribuir en gran medida a minimizar las posibilidades de un corte de red no planificado y maximizar la productividad en toda la empresa. El enfoque debe extenderse más allá de los problemas de redundancia y de la administración de la infraestructura automatizada.
Aspectos por considerar para mejorar la confiabilidad:
- Unificación de la plataforma de cableado en una red convergente
- Implementación de la administración de la infraestructura automatizada (AIM) para hacer la gestión de la capa física y proporcionar información en tiempo real sobre cualquier cambio
- Capacidad para migrar a velocidades más altas con una interrupción mínima de la red
- Sistema robusto de cableado de cobre para soportar dispositivos actuales y futuros alimentados vía PoE
- Soporte para redes móviles Wi-Fi, 3G/LTE/5G y de múltiples operadores
Recomendaciones para la implementación
La correcta estrategia de conectividad puede ayudar en gran medida a maximizar la confiabilidad y disponibilidad de la red. El grado de éxito depende en gran medida del diseño, la composición y la administración de la red empresarial. A continuación, algunas áreas para examinar.
Inteligencia de la infraestructura
Los sistemas de administración de la infraestructura automatizada (AIM), como imVision® de CommScope, pueden ser una estrategia clave en el esfuerzo por maximizar la confiabilidad y la disponibilidad. Los sistemas AIM utilizan una plataforma inteligente para monitorear continuamente toda la conectividad de la red en la capa física. Además, pueden documentar automáticamente todos los cambios e incluso alertar al personal en caso de que se detecte una nueva conexión no programada u otra circunstancia potencialmente perturbadora.
Soporte de la infraestructura convergente
La convergencia es cada vez más importante en la red LAN empresarial. Bajo este nuevo paradigma, el cableado de cobre de Categoría 6A es el componente fundamental. Más allá de simplificar la red física, permite a sus administradores transportar fácilmente velocidades superiores y proveer mayor ancho de banda para las tecnologías emergentes. Usando la Categoría 6A como el medio preferido para la alimentación remota vía PoE, los administradores pueden fácilmente extender la red hasta el límite, usando por ejemplo PoE mejorado para integrar la conectividad IoT y los dispositivos que requieran mayor potencia. En palabras simples: una red empresarial convergente basada en Categoría 6A puede mejorar la confiabilidad de la red y la continuidad del negocio.
Cableado estructurado con componentes modulares
El crecimiento, la migración y la modificación de la red en los edificios comerciales son un hecho. Los operadores de red deben tener la capacidad de adaptarse fácilmente a estos cambios, y con un impacto mínimo en los usuarios. Esto requiere una topología de cableado estructurado bien planificada que sea capaz de ampliarse y extenderse a petición, utilizando componentes modulares que se puedan cambiar para permitir nuevas tecnologías y más altas velocidades. Mediante la integración de diversos conceptos, como una red de conectividad universal (UCG), los operadores también pueden proporcionar escalabilidad preparada para el futuro para sistemas de comunicación inalámbrica dentro de los edificios, como Era™ de CommScope.
A medida que la red empresarial se vuelve más conectada, proteger los datos confidenciales se vuelve una tarea compleja. Mantenerse un paso adelante de los riesgos potenciales es un trabajo de tiempo completo.
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